“Nadie puede por sí solo, silbar una sinfonía. Para tocar una sinfonía, se necesita una orquesta”. Todo el que dirige una empresa sabe que necesita que haya unión entre sus empleados, y a su vez, éstos se necesitan unos a los otros para ir logrando los objetivos de negocio. Pero en ocasiones, algo tan simple, se nos olvida y por eso desde la dirección y Recursos Humanos deberían hacer especial hincapié en lograr la cohesión del equipo, de ahí nace team building: la construcción de equipos.
La búsqueda de un ambiente adecuado de trabajo no es algo moderno, ya en los años 30 investigadores como Elton Mayo, sociólogo y teórico de las organizaciones, comenzaron a trabajar en torno a la idea de cómo unas buenas condiciones de trabajo, un ambiente laboral agradable y el reconocimiento hacia los trabajadores incrementan notablemente la productividad. Parece algo muy obvio, pero todavía a día de hoy muchas empresas no lo tienen en cuenta.
Las actividades de team building son ya una dinámica fija en los planes de Recursos Humanos desde hace tiempo, pero, ¿cuál es el objetivo principal? Llevar al equipo más allá de la oficina, y con esto no hablamos sólo de quedar a tomar unas cañas tras la jornada laboral, sino de hacer que todo el grupo, conocidos y desconocidos entre departamentos, realicen una actividad conjunta que les permita vivir nuevas experiencias y relacionarse con sus compañeros fuera de la oficina.
Estas dinámicas de grupo son muy importantes, hay que tomar consciencia de que nuestros empleados y compañeros son antes que nada, personas, y que detrás de cada individuo hay distintas ambiciones, sentimientos, estados anímicos, que ineludiblemente acaban repercutiendo en su modo de trabajo. Si se quiere sacar el mejor potencial de cada trabajador, hay que trabajar en todas sus facetas: tanto la laboral como la profesional. El team building no busca sólo tener trabajadores “contentos”, sino profesionales realizados en todos los niveles.
¿Qué beneficios tiene el Team Building?
- Mejora la productividad.
- Fortalece el espíritu de grupo y ayuda al trabajo en equipo.
- Aumenta la empatía entre los empleados.
- Ayuda a conseguir los objetivos empresariales y al desarrollo profesional y personal.
- Aumenta la motivación y la actitud positiva.
- Promueve la competitividad sana y las ganas de superación. Los encargados y jefes aprenden a delegar responsabilidades.
- Mayor resistencia al estrés.
- La capacidad de ser capaces de identificar fortalezas y debilidades y tomar decisiones acorde.
- Refuerza la imagen de marca de la empresa.
Actividades para fomentar el Team Building
Dinámicas de team building en el exterior
- Trabajar junto a un coach empresarial: los coaches son expertos en identificar las carencias de un equipo, y a través de juegos y distintas actividades, trabajan en las particularidades del equipo, fomentan la comunicación, la adquisición de responsabilidades. Capacitan a los participantes para ser capaces de experimentar nuevas experiencias, superar debilidades como equipo y en definitiva, salir reforzados.
- Outdoor Training: ¿Qué puede haber más de equipo que el deporte? El outdoor training está dirigido a pequeños grupos, para realizar actividad física a través de juegos y ejercicios mientras trabajan el liderazgo, la toma de decisiones, el trabajo en equipo, la comunicación, así como la superación personal… Además numerosos estudios demuestran que el contacto físico ayuda a crear vínculos emocionales con la otra persona, trabajar codo con codo, lo refuerza. Lo ideal sería realizarlo al aire libre ya que la oferta es más extensa: construcción de fuertes, actividades de supervivencia, orientación, senderismo, incluso actividades acuáticas.
- Voluntariado: la Responsabilidad Social Corporativa está muy extendida en las empresas, pero normalmente, la contribución solidaria se da desde la empresa en general o son los directivos los que acuden a distintas actividades. Es importante que el compromiso ético que una empresa adquiere con una organización se extienda a sus empleados.Asistir a actividades de voluntariado, en las que como grupo tienen que ayudar a personas en riesgo de exclusión, con discapacidad, o más desfavorecidas hace que los empleados mejoren sus habilidades comunicativas ¡Y que aprendan a escuchar al otro! Aquí las opciones son muy numerosas ya que hay muchos colectivos que requieren de ayuda, lo mejor es seleccionar aquel que mejor se identifica con los valores de la organización y a la que ésta, por ende, mejor pueda ayudar.
Muchas empresas de ocio y turismo, conscientes del incremento de actividades de empresa, han incorporado entre sus servicios el de team building: las ‘escape room’ se han popularizado en los últimos años, a través del juego los equipos desarrollan la lógica y tienen que trabajar juntos a contrarreloj (algo no muy distinto a lo que ocurre a veces en las jornadas de trabajo, pero aquí con un complemento lúdico). Otro ejemplo son las bodegas, el enoturismo es un sector en auge y los directivos de bodegas han visto en las organizaciones un cliente más. Entre sus servicios incluyen catas de vino, ir a la vendimia por un día o actividades en los viñedos, entre otros.
Dinámicas de team building en el interior de la empresa
- Jornadas retrospectivas: reuniones de equipo más allá de las exclusivas sobre proyectos o reuniones clientes. Al menos una vez al mes, reunir al equipo al completo, todos los departamentos y la dirección general para realizar una evaluación retrospectiva sobre el trabajo del grupo. Preguntarse ¿Qué estamos haciendo bien? ¿Y mal? ¿Qué necesitamos reforzar? ayuda a mejorar la comunicación. Es importante que haya un clima de confianza entre empleados y directivos para que los primeros puedan proponer y lo más importante, sentirse escuchados.
- Crea un espacio de desconexión: en España, en especial, estamos bastante (mal) habituados a “echar” muchas horas en la oficina, aunque ya sabemos que la fórmula de a más horas más productividad no suele ser cierta. Deja un espacio en la oficina reservada para tus empleados (que no sea la cocina), pon un par de sillones, una máquina expendedora o de café, un lugar agradable donde poder ir a sentarse y desconectar unos minutos. Un lugar de encuentro entre compañeros. No lo entiendas como una “pérdida de tiempo” sino como un descanso mental para tus empleados y un modo de que se relacionen entre ellos.
- Que los cumpleaños y festividades se celebren: si tu empresa es pequeña, puedes reservar media hora para celebrar determinadas fechas: un cumpleaños, una promoción, un éxito laboral, para juntarse y compartir comida de picoteo, unos dulces, tomar algo… Marca estos días en el calendario, celebrar juntos las buenas noticias ayuda a estar juntos también en las malas.
Como hemos visto hay infinitas posibilidades y métodos para trabajar el team building en tu empresa. Simplemente se trata de evaluar cuál es la que mejor se adapta a las necesidades de tu equipo y sino la encuentras hay profesionales que podrán asesorarte en todo el proceso. Con estas dinámicas se aprende a afrontar las dificultades, derribar barreras y sobre todo a dotar de sentido a la palabra equipo.