La formación recibida en cada uno de los master de la Escuela de Negocios, se completa con la realización de entrevistas y dinámicas centradas en las técnicas de evaluación y orientación denominadas Assessment Center.
Esta metodología consiste en una serie de ejercicios, cuestionarios y simulaciones que ayudan a determinar la habilidad y desempeño del alumno en relación con diferentes roles y competencias. Varios observadores y dinamizadores, especialmente preparados, participan en este tipo de evaluaciones y son los encargados de registrar los comportamientos de los participantes, los cuales, posteriormente, reciben feedback sobre su grado de desarrollo, así como un inventario de sus puntos fuertes y áreas de mejora. El Assessment Center ha demostrado tener un considerable poder predictor de las conductas de las personas en situaciones concretas, pudiendo extrapolar su desempeño futuro, a modo de diagnóstico laboral y profesional.
El coach (orientador) facilitará la creación de un espacio de confianza que permita a la persona hacer reflexiones libremente para tomar conciencia sobre quién es, qué tiene y a dónde quiere ir. A través del diálogo y la escucha se construyen los objetivos y se prepara el plan de seguimiento. La actividad del orientador consiste en ayudar a tomar conciencia a la persona de su situación para enfrentarle a la misma y pasar a la acción mejorándola. Todo ello a base de preguntas y feedback descriptivo. La secuencia es la siguiente:
- Establecimiento de la situación deseada u objetivos a conseguir en términos de misión, visión o simplemente planes de acción a tomar o modo de trabajar.
- Diagnóstico de la situación actual (área de mejora o problemas a resolver).
- Plan de acción (con la elaboración del proyecto que lleve a conseguir la resolución de la mejora).
- Evaluación de los resultados (control y seguimiento a través de los indicadores que se hayan fijado en los diferentes proyectos).
Algunos de los beneficios más claros que el Coaching puede aportar a personas involucradas en un proceso formativo son:
- Mejora del desempeño: El Coaching favorece que individuos y equipos pongan lo mejor de sí mismos en las tareas que realizan, algo que la capacitación tradicional, en general y por sí sola, no consigue.
- Identificación de talento y desarrollo competencial: A través del Coaching podemos identificar nuestros puntos fuertes y áreas de mejora, conectar con nuestros principales recursos y usarlos para superar nuestras limitaciones.
- Mejora del aprendizaje: La relación del proceso de Coaching con la identificación de elementos motivantes facilita el aprendizaje y afán de superación del alumno.
- Mayor flexibilidad y adaptabilidad al cambio: La esencia misma del Coaching está empapada del espíritu de cambio y responsabilidad. Hacer lo mismo que hice hasta ahora no resulta una estrategia efectiva para mejorar. Cada vez es más evidente que la flexibilidad y la adaptabilidad constituyen factores clave de desarrollo personal y profesional.
Sobre la importancia y la actualidad del coaching citamos la Investigación realizada por la Asociación Internacional de Dirección de Personal y publicada en la revista Public Personal Management. “Los cursos de formación por sí solos incrementan la productividad en un 22,4%, mientras que combinando los cursos de formación y el Coaching, la productividad se eleva hasta un 88%”.