“Plantear nuevas preguntas, nuevas posibilidades, mirar viejos problemas desde un ángulo nuevo, requiere de imaginación creativa y provoca un verdadero avance en la ciencia”.
Albert Einstein
Muy sabio Einstein con sus frases ¿no crees?. Y es que una vez más tiene razón cuando de creatividad, imaginación e innovación se trata.
¿De qué va este post? De despertar ese niño que llevamos dentro, sembrar una semilla y aportar un granito de arena en pro de la innovación y creatividad.
Hoy en día todo va muy rápido, todo cambia a pasos agigantados: tecnología, sociedad, organizaciones, personas. Y estamos tan abrumados con tantos cambios que nos pasamos la vida en una carrera contínua y, lo peor, en piloto automático.
Aún viviendo en una era de cambios pensamos que ya todo está inventado, que las reglas del juego no se pueden cambiar. Cada día estamos más condicionados por los patrones aprendidos. Debemos detenernos un momento a pensar si lo hacemos más por comodidad o porque no nos sentimos capaces de tener una idea que cambie el modo “normal” de hacer las cosas.
Pues aquí la buena noticia: todos somos capaces de generar ideas brillantes, de esas ideas disruptivas que al fin y al cabo son el punto de partida de la evolución. Y no hablamos sólo de ideas que cambien el mundo, si mejoran nuestro mundo ya es ganancia.
¿Qué es una idea disruptiva?
Una idea disruptiva es aquella que rompe esquemas, que salta patrones definidos y permite conseguir una mejor forma de hacer las cosas, ya sea resolver un problema, optimizar procesos, crear nuevos productos y/o servicios.
Un ejemplo claro de ello en el mundo de los negocios ha sido y sigue siendo Apple, que ha sabido adelantarse y ofrecer productos que incluso el consumidor no sabía que necesitaba. Como dijo Steve Jobs:
“Muchas veces la gente no sabe lo que quiere hasta que se lo enseñas”
Si ponemos en pausa el piloto automático y dedicamos un tiempo a salir de la caja en la que estamos inmersos, expandimos nuestra mente a un sinfín de posibilidades, podremos descubrir oportunidades valiosos ocultas detrás del statu quo.
¿Cómo podemos generar ideas disruptivas en pos de la innovación?
La clave está en la creatividad. Por ello al principio hablamos de despertar ese niño que llevamos dentro y que, en algún momento del camino, decidimos callar.
Más de una vez escuchamos decir “es que yo no soy creativo”, te recordamos que todos tenemos creatividad, de diferentes tipos por supuesto. Sólo debes dedicar tiempo para nutrirla ¿Cómo?, sigue estos tips:
Tómate tu tiempo y no te presiones
Cuando te sientes bloqueado o cansado, tómate un respiro, levántate, distrae la mente de lo que haces, descansa sin presiones. En esos momentos de relax y expansión surgen las mejores ideas.
Desconecta del ordenador
Incentiva tu creatividad con papel, lápiz, colores, marcadores, post-it. Deja volar tu imaginación a través de dibujos (no importa si no dibujas bien). Además, es recomendable llevar contigo siempre una libreta donde puedas apuntar esas ideas fugaces que aparecen inesperadamente…¡no las dejes escapar!
Brainstorming o lluvia de ideas
Esta técnica es muy utilizada en las organizaciones para generar ideas, aplícala en tu vida personal, estudios, emprendimiento. Escribe todas las ideas que se te ocurran en torno a un tema, así sean ideas locas, consulta además con tus familiares y amigos qué se les ocurre y luego filtras. Te sorprenderás de la infinidad de posibilidades que obtienes, incluso fusionando varias ideas.
Sigue formándote
La formación no debe acabar nunca. Actualízate, el mundo va muy rápido como para echarse en el sofá a ver tv. Arriésgate a estudiar áreas nuevas, tal vez descubras que tienes capacidad para hacer cosas que ni tu mismo pensabas que podías.
Libera tu niño interior
Mira el mundo desde los ojos de niño, porque ese niño estará maravillado de todo lo que descubre a su paso. Además, leer libros infantiles también te ayudará en este proceso de ver las cosas desde una nueva perspectiva.
Cuestiona la forma “normal” de hacer las cosas
No des por hecho que si algo se hace de una manera, es la única forma o la forma correcta. Hazte preguntas ¿por qué de esa forma? ¿qué pasa si lo hago así…? prueba diferentes maneras de hacerlo.
Si bien es cierto que no todas las ideas conllevan al éxito, sí que ayudan a construir el camino. No calles nunca tu niño interior, mantenlo vivo y verás como siempre encontrarás grandiosas soluciones en tu vida profesional y personal. Que la creatividad sea parte de tu vida. Recuerda que:
“Al mundo no lo mueve el dinero, lo mueven las ideas brillantes”
Bernardo Stamateas